Después de los desacuerdos en la frontera que mencionó Marian en el post anterior, seguimos caminando para tomarnos un colectivo que nos llevara al primer pueblo, Changinola, donde tendríamos que hacer conexión con otro colectivo que nos llevaría hasta Almirante. Almirante es el paso obligado para llegar a Bocas del Toro porque es el pueblo desde donde salen las lanchas al archipiélago (Bocas es un conjunto de 6 islas principales y montones de islas más chicas sobre el mar caribe y la única forma de llegar es en lancha o en avión). En estas islas estuvo Cristobal Colón en 1502, durante el cuarto y último viaje que hizo a América.
En teoría el colectivo iba a pasar en 10 minutos, los cuales terminaron siendo casi 1hora y media jaja. Tardó pero llegó y nos tomamos el primer colectivo del último trecho del viaje. La distancia que faltaba no era mucha pero como todo Centroamérica el tiempo de viaje si, asique había que tener paciencia. El primer colectivo iba lleno de gente (en la parte de atrás lleno de chicos que iban al colegio y nos empezaron a decir gringos) asique tuvimos que viajar parados, pero el segundo viaje fue en una minivan con aire acondicionado asique todo un lujo jaja. Llegamos a Almirante y después de poder liberarnos de un señor que nos seguía e insistentemente quería vendernos cosas diciendo que era agente turístico, compramos los boletos de la lancha y casi enseguida la tomamos. Desde ahí mucho más no iba a faltar, unos 30 minutos de viaje nada más y llegamos al pueblo principal de Bocas sobre la Isla Colón, la más grande del archipiélago.
Ya estábamos con ganas de llegar...
La lancha a Bocas
Llegando al pueblo Bocas del Toro, Isla Colón
Isla Colón - Pueblo Bocas del Toro
El pueblo de Bocas es algo muy distinto a los otros pueblos que veniamos visitando y por ende completamente distinto a lo que nos habíamos imaginado. Calle principal de asfalto doble mano y con dos carrilles en cada mano, autos y edificios de dos o hasta varios pisos jaja. Todo muy lindo y muy bien mantenido. Les vamos a deber fotos del pueblo de Bocas porque por alguna razón que ninguno de los dos tiene presente no le sacamos ni una sola foto al pueblo jaja.
La llegada siguió la rutina que tenemos para todos los lugares a donde vamos. Fijarnos en la guía 2 o 3 opciones donde hospedarnos, llegar, ver que nos parecen las opciones que habíamos preseleccionado, debatir que opción nos parece la mejor, elegir, ir a dejar las mochilas al lugar que elegimos y, lo más importante de todo el proceso de llegada, ir a comer jaja. La importancia de la comida radica en una cuestión muy importante y es que cuando estamos viajando de un lado al otro se hace difícil poder sentarse a comer algo tranquilos y entonces vamos picando cosas a medida que avanzamos pero no es lo mismo que una comida con todas las letras. Entonces llegamos casi siempre a los lugares con muuuuucho hambre. Esto sumado a lo cansado que llegás hace que el momento en que las mochilas ya están en el lugar que elegiste para dormir y vos estas tomando una cerveza a punto de comer sea algo que no tiene precio jaja.
El hostel donde dormirmos en Bocas se llama Tungara (ex hostel Calipso) y nuestras camas estaban en un dormitorio de 9 personas, pero con aire acondicionado asi que estabamos como unos reyes jaja. A Metar, nuestro compañero de viaje que conocimos en San José y terminó viajando con nosotros casi 10 días, después de haber perdido el sorteo que hicimos para elegir cama, le tocó dormir en una cama cucheta que estaba encima de otra cama cucheta, osea arriba de dos personas y a casi 6 metros del piso jaja. Como decía que el aire no llegaba hasta tan arriba (comprobamos que era verdad!) es que decidió dormir en un mini colchón inflable en el piso los días que estuvimos en esa isla!
El pueblo de Bocas es un lugar muy turístico y con mucha gente joven. Se nota enseguida porque ves un montón de gente caminando por la calle y en los hostels y restaurants que hay sobre la calle principal. También se nota enseguida que es un lugar donde hay muchas opciones para salir de noche porque vas caminando por la calle y te reparten una propaganda distinta para un distinto boliche en cada cuadra!
Todo el desarrollo que se ve en Bocas del Toro es el reflejo del boom turístico que hay en las islas desde los años 90. Si bien todavía no se llegan a ver cosas como cadenas de comidas rápidas (como en Costa Rica donde hay Mc Donalds y Burger Kings por todos lados ), se nota que se esta invirtiendo mucho en el lugar y que esta creciendo año tras año. Las islas de Bocas son realmente un paraíso y lo lindo es que uno puede aprovechar esas comodidades que da el desarrollo y al mismo tiempo todavía se puede disfrutar de lugares impresionantes que no fueron explotados. Ojalá que logren mantenerlo así....
Nos dieron ganas esa noche de salir un rato y tomar una cerveza asique nos pusimos las ojotas y la ropa de gala y fuimos un rato a un bar que esta en la orilla y que tiene un deck que esta sobre el agua. Íncreíble la vista y muy lindo todo, aún siendo un bar muy simple con lo lindo que es el lugar te llamaba mucho la atención. Esuchamos un poco de música, tomamos una cerveza (quizás 2 o hasta 3 también jaja) y volvimos al hostel. Quedaba mucho por conocer todavía al día siguiente...
Cocinando algo antes de salir
Nos habían contado que había unas playas muy lindas a unos 40 minutos en bici asique al día siguiente nos levantamos temprano y fuimos a alquilar unas bicicletas para ir a conocerlas. El camino no podía más de lindo, después de pedalear 20 minutos el asfalto se terminó y el camino empezó a ser de tierra. Vas andando por el camino y tenés a un lado el mar y al otro la isla que poco a poco se va haciendo más virgen. En las playas por las que vas pasando hay cada vez menos gente al punto que en un momento estabamos nosotros solos paseando en frente de playas paradisíacas con el agua turquesa transparente. Bocas del Toro y sus playas son un lugar muy muy lindo!! Cuestión que paramos en una playa que nos gustó, nos metimos un rato al mar, sacamos algunas fotos y emprendimos la vuelta. Acá van las fotos:
A la ida habíamos visto un bar en frente de la playa que nos había gustado asique a la vuelta paramos en el bar y nos tomamos una cerveza viendo el mar antes de volver al hostel...
Al día siguiente fuimos a conocer la playa más alejada de Isla Colón: Playa Estrella. Para llegar a esta playa tuvimos que tomar una minivan y el viaje duró como 40 minutos. Llegamos a un lugar y de ahí tuvimos que caminar otros 25 minutos hasta finalmente llegar a Playa Estrella. El nombre se debe a que esta llena de estrellas de mar. No es que hay una no dos, esta repleto una al lado de la otra!!! Esta playa es una seria candidata a ser la más linda que nos toco ver en este viaje (aunque en esta elección una ficha va para Santa Teresa-Mal País que se lleva una parte importante y tiene un sabor muy especial para nosotros!!). No hay mejor que ver las fotos para ver porque digo esto:
Última caminata para llegar a Playa Estrella
Importante no sacar las estrellas del agua
En la playa lo único que hay es un puestito donde todo era muy casero y se podía comer langosta (no tuvimos la suerte de poder probarla, más adelante voy a contarles porque). Además de este puesto no había más que playa y mar completamente transparente. Empezó a lloviznar asique nos sentamos en las mesas del puesto a esperar que parara y conocimos una pareja de argentinos que estaban de vacaciones. Estaban un poco preocupados porque el día estaba feo. Los días previos habían estado nublados e incluso había llovido durante un rato pero después el sol salía con todo de golpe y a la gente del lugar nos había comentado que era lo más común que pasara, asique les dijimos que iba a mejorar para que se queden un poco más tranquilos (y nosotros también porque sabíamos que no ibamos a volver a esta playa!).
Después de un rato pasó lo que esperabamos y de un momento a otro las nubes se fueron, el sol salió y el día paso a estar espectacular! Fuimos a caminar un poco más por la playa y nos metimos al mar a nadar un poco. Nadando fue que conocimos a un señor del lugar que estaba cazando langostas y que con mucha buena onda nos ofreció mostranos como las cazaba y prestarnos una máscara de snorkel para poder verlo. Progamón jaja!! Le dijimos que sí, fuimos a buscar la máscara y lo acompañamos a pescar. Lo que hacía el era sumergirse un par de metros bajo el agua cuando le parecía que podía haber una langosta, generalmente debajo de una roca sobre el fondo. En caso que si hubiese, las atrapaba con una herramienta que llevaba que era algo así como una cinta adherida a un palo largo.
Increíble la diferencia cuando salió el sol:
Volvimos al lugar donde nos había dejado la minivan y ahí comimos algo mientras mirábamos la semifinal de la Eurocopa donde España eliminó por penales a Portugal.
Sabíamos de este partido, asique hay que reconocer que tuvo algo de influencia para que comamos ahí el hecho de que hubiera televisión jaja (lo que nos tocó perdernos fue la langosta...). Poio una genia, se prendió también y vió todo el partido jaja
Isla Bastimentos
Apenas llegamos de vuelta al pueblo de Bocas agarramos las mochilas que habíamos hecho en la mañana y nos fuimos para donde salen las lanchas para tomar una a otra de las islas del archipiélago: Isla Bastimentos. Si bien está a solo 10 minutos en lancha, esta isla es otro mundo.
A diferencia de Isla Colón, es mucho más rústica y local. En el pueblo, Old Bank, no hay calle pavimentada, no hay autos, se ven pocos turístas dando vueltas y hay poco ambiente festivo. Es un lugar mucho más tranquilo. El pueblo tiene sus orígenes en la industria bananera (como casi todo en el caribe de Panamá y Costa Rica) y mucha de la gente que vive en el pueblo, especialmente de la gente más grande, trabajó para esta industria.
Fuimos al hostel, dejamos las cosas y empezamos a buscar un lugar que tuviese televisión para ver el partido de Boca contra la Corinthians por la ida de la final de la Copa Libertadores. Vimos el partido, tomamos algo y volvimos.
El hostel
Con esta vista desde el cuarto
Old Bank
Por lo que habíamos averiguado, para ir a las playas de esta isla había dos opciones: caminando por caminos de tierra que generalmente tienen mucho barro a causa de las lluvias que hay en Bocas o tomando una lancha. Esto es lo que hace que las playas de este lugar sean lo virgenes y lo lindas que son. Hay un par de proyectos para construir hoteles y complejos pero, a pesar que algunos ya se están construyendo, la gente local nos contó en más de una oportunidad que están haciendo mucha fuerza para que estos no se hagan. Esperemos que no se arruinen estos impresionantes lugares!
Tuvimos dos días de playa en esta isla. El primero decidimos probar suerte caminando hasta Playa Wizard. Después de 40 minutos a través del barro logramos llegar al lugar como todo lo que vimos en Bocas es impresionante!! Lo que sí, un consejo para quienes quieran hacer ese o cualquier camino con mucho barro: no vayan con havaianas jaja!!!. Los tres fuimos con havaianas, y como se te salían, te hacían resbalar y hasta se rompían, terminamos haciendo el camino descalzos!! La playa es totalmente vírgen y no había más gente que nosotros 3 y otras 3 o 4 personas. Estuvimos ahí un rato y disfrutamos del lugar....
Playa Wlizard
Esa tarde Metar se iba para Panama City asique volvimos al hostel con él y después de como 10 días viajando juntos lo despedimos porque nosotros nos quedabamos un día más en Bocas. Igualmente nos ibamos a volver a ver dentro de dos días en Panama City para festejar su cumpleaños!
Esa noche conocimos a Segio y Juan, dos españoles que estaban de vacaciones en Panamá. Con ellos fue que organizamos para ir con una lancha al día siguiente a conocer la Isla de Polo. Polo es un señor de 70 años que hace 50 decidió irse a vivir a esta playa por su cuenta y desde ahí que vive solo y come de lo que le da la isla!!! Entre esas cosas están las iguanas, las cuales las hace a la parrilla o las usa para hacer una sopa y de las que también come sus huevos. Nosotros tuvimos la suerte de que Polo nos convide un poco de su sopa de iguana y nos dé de probar unos huevos ahumados que Juan y yo nos animamos a probar jaja.
Además de la desgustación de iguana, ese día hicimos snorkel (estuvo lindo, no vimos nada impresionante pero la pasamos bien!) y salimos a caminar por la playa. Todo esto hasta el mediodía mas o menos que nos agarró una tormenta tropical y fuimos a refugiarnos a lo de Polo (un quincho viejo que había construido un italiano que quería hacer un bar en la playa pero que después de construirlo nunca más apareció y Polo se fue a vivir ahí).
Kein nos acompañó
Con Juan y Sergio
Llegando la tormenta...
Polo y su refugio
Degustación 1: huevo de iguana
Así preparan las iguanas antes de cocinarlas
Iguana a la parilla
Sopa de Iguana
Degustación 2: sopa de iguana
Un video de la degustación de sopa...
A la tarde volvimos para el pueblo, nos dimos una ducha y terminamos de armar las mochilas para arrancar el viaje para Panama City, a donde teníamos que llegar si o sí al otro día porque había un cumpleños que festejar. En ese momento nos enteramos que no había más lugares en el colectivo que va directo hasta Panama City, con lo cual no nos quedaba otra que ir hasta Almirante por nuestra cuenta y tratar de conseguir algún colectivo o minivan que nos lleve. La verdad es que deberíamos haber reservado el colectivo a la mañana pero pensamos que no iba a haber problema y nos quedamos sin lugar jaja. Así empezamos el viaje a Panama City, el cual debería haber durado 10 horas pero terminó durando para nosotros unas 16 horas!! Pero buen ese cuento ya es parte del próximo post......
Abrazo grande y hasta la próxima!
Matías
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